TITIRITEROS
Titiriteros
acampan
a
la orilla del riachuelo,
entre
cantos y fandangos,
como
bajados del cielo.
En
seis hermosas carretas,
_pintadas
con mucho esmero_
a
cada cual más vistosa,
recorren
el mundo entero.
Con
ellos traen una cabra,
un
chimpancé, un oso negro,
seis
mulas con cascabeles,
cuatro
galgos, tres podencos,
un
manubrio, panderetas,
muchos
chiquillos, abuelos...
Y
a los sones de trompeta
y
al estruendo de un tambor,
en
ameno pasacalles,
todo
el pueblo se enteró.
-A
las once de la noche,
habrá
en la Plaza Mayor,
atracciones
para todos.
Traigan
silla, por favor.
Se
llegó la ansiada hora
y,
en la plaza, hubo un gran lleno.
El
chimpancé, juguetón,
respingaba
por el suelo.
Tras
el desfile, teatro,
-entretenido
y ameno-
trucos
de magia, equilibrios,
canciones,
bailes, sorteo
de
balones y muñecas,
de
un triciclo y caramelos.
-¡Hay
caramelos "pa" "tos"!...
"Pa"
los grandes y pequeños.
El
oso puso sus zarpas
al
domador en el pecho.
¡Qué
susto el que se llevaron
los
que estaban cerca de ellos!...
La
cabra fue la primera,
seguida
por los podencos,
en
subir una escalera,
dejándonos
boquiabiertos.
¡Qué
pronto llegó el final
a
la plaza de aquel pueblo!
...
Ya
se marchan los gitanos
por
entre aquellos senderos,
con
sus funciones a cuestas,
alegres,
dicharacheros...
Van
entonando canciones
que
se pierden a lo lejos...
¡Qué
jornada más hermosa
se
marcha por el sendero!...
¡Adiós!...
Les
dicen los niños.
¡Adiós!...
Les
dicen los viejos.
Recuperar el folclore de los pueblos... ¡qué hermoso!
ResponderEliminarCarlos, un poema lleno de vida y que nos trae a los que peinamos canas - ya pocas - un mundo ya perdido de nuestra infancia. ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarGracias, Luia y sí, Biblioteca del Colegio Príncipe de Asturias, razón tienes; pero las peinamos, que no es poco. Un abrazo.
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