Paseo de Las ÚRSULAS

Paseo de Las ÚRSULAS
PASEO DE LAS ÚRSULAS(Salamanca).-Por José Luis Pérez Pablos

jueves, 21 de mayo de 2015

MI SER NO ENCUENTRA.-Por Jimmy Valdez Osaku

Mi ser no encuentra respuestas a tantas interrogantes, a tantos abusos, al sinfín del absurdo que es la degradación total de nuestro sistema de vida, de nuestros recursos, de nuestros derechos y soñado bienestar concerniente a todos.

Los gobiernos de la seudo-democracia criolla, se han ido superando unos a otros en cuanto a fracasar, a corromperse, a insistir en conservar el poder al precio y medida que sea (caiga quien caiga, esté quien esté y con los colores que aparezcan, en pos de seguir robando, de seguir atentando contra la dignidad de los más desfavorecidos, esos de siempre; abandonados y hediondos al ron que les compra los votos, que les margina, que termina hundiéndoles aún más en la miseria y la ignorancia).

Es muy doloroso observar la desfachatez en nuestra sociedad, en nuestro sistema de gobierno, en todos los planos sociales del ser dominicano hoy en día. Las generaciones más jóvenes no tienen fe ni amor propio, mucho menos por el país; pues el país en su esencia administrativa le ha fallado, le ha vendido, le ha mostrado un holograma de falsas actitudes, de falsos avances, de fáciles métodos criminales para alcanzar el éxito, para brillar, para salir del dolor que les arrastra desde siempre, que les tiene confinados a un país “inservible” prendido en candela por las cuatro esquina, sin dolientes ni parientes, sin presente, ni futuro.

Somos un hazmerreir de nación cuyo mayor orgullo es mostrar playas y exportar peloteros. Playas cada vez más contaminadas, hediondas, descuidadas, heridas de muerte, pero no tanto como nuestros ríos y lagunas, los que quedan, los que aún no son asesinados en las montañas donde nacen, como aspira a que ocurra Falcondo y la Barric Gold, bajo el auspicio de fuerza de nuestro gobierno y demás interesados.

La constitución dominicana es el relajo más deprimente de todos. El trozo de papel con el que todos los gobiernos se limpian el c…!   ¿Cómo pedir decencia, ética, moral a gobierno alguno que en primera instancia llega al poder apoyándose, negociando, tapando con un dedo la fetidez de toda la corrupción posible, la fetidez de lo impune, de lo falaz?

Prefiero ser necio con las cosas que en mi cabeza no caben; que me inquietan, que escapan a mi lógica más elemental haciendo preguntas prejuiciosamente inconexas, preguntas sueltas, guturales, pues me da rabia que de la miseria de mi pueblo se saquen tantos miles de millones dólares para el maldito asunto de la electricidad, el agua potable, el transporte, la recogida de basura, los hospitales públicos y la pírrica educación que nos gastamos.

En el país existen cuchomil partidos políticos. Cuchomil bisagras de malparidos enganchados al “vagón del asalto” que son las boronas de los tres grandes cánceres nacionales. Yo no comprendo el cómo dichos partiduchos fueron tan fácilmente reconocidos por la Junta Central Electoral y el vigoroso y esperanzador Partido Alianza País, tiene que estar llamando a jornadas nacionales e internacionales de protestas para logra su reconocimiento?

Hace días que vi el triste espectáculo de varios jóvenes diciendo barbaridades sobre los padres fundadores de la patria. Muchachos que por encima de la rabia daban pena, vergüenza, desaliento, pues ese es el país que más quieren los que desde el poder promueven el asco y la desaparición de todo lo digno, de todo lo decente, de cualquier reclamo y justicia.

Las gentes de mi país no son capaces de reflexionar, de verse en el espejo haitiano (espejo que se ha mudado a todo rincón nacional, trayendo consigo lo bueno y lo malo de su miseria). Las gentes de mi país prefiere partir antes que tomar partido en favor de sí mismos, de una mejor sociedad, de un equilibrio justo entre los que más tienen y los que aspiran a la dignidad del pan diario, la salud, la educación y todo el resto de cosas que son los derechos humanos. 


Jimmy Valdez Osaku

Caligrafía

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