Volveré a la ternura que retiraste de mis pasos.
Soy emperador del mundo
y reclamo prebenda de tu melodía.
Te obligo a arrodillarte
aunque ya lo haces ante los spots de tu morada.
pues eres funcionario irredento .
¿Conoces las Fugas de Bach?
Es una pregunta retórica
pues supongo, que en tu miseria
nunca has entendido la lágrimas del Sol.
Vives consagrado en sangre
y en los pasos hambrientos de una hiena.
No sonrías.
Ha llegado el ventanal que cierra tu aventura.
Ahora podremos apreciar de nuevo el olor a violetas
al tiempo que tu cuerpo se hunde en el fango
entre la alegría de los nuevos oficiantes.
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