El poeta catalán Eudald Escala Pujadó, envía este poema escrito en 2004, durante una de sus estancias en Salamanca
de nuevo
con los ojos ciegos
cerrados
miro la nada eterna
cada vez
veo más claro que
tú no eres
que no existes más
que en mi
mezquino cerebro
terriblemente cruel
seguiré rezando
necesito
seguir rezando por
nosotros
condenados a la
luz negra
al olvido la ausencia
a la nada
de la que nacimos en
mala hora
y no nos perdona el
ansia boreal
de conocer la verdad
aunque duela
la nada lo es todo y nada
No hay comentarios:
Publicar un comentario